!Ay, vampirízame…! A veces nos enfrentamos a un patrón que no es nuestro y tratamos de ir «adivinando», más que tejiendo, las intenciones de la diseñadora. En este caso mi vampiro está basado en un patrón muy pituco pero con bastantes complicaciones técnicas de Havva Ünlü, que si lo buscáis lo tiene a la venta con el nombre del mítico transilvano Vlad.
El original es más guapo. A mí me gustan los amigurumis más caricaturescos. Y aunque no hubiera sido así, al bordarle las facciones en lugar de recortar fieltro, siempre adquiere un aspecto personal. Ya sé que a muchas os da miedo bordar sobre todo los ojos. Pero hay que atreverse porque así la personalidad de vuestros muñecos será única, por muchos iguales que encontréis nadie será capaz de repetir esa expresión del vuestro. A mí todos me salen medio perdidos…
Aquí vemos al vampiro en las funciones propias de su sexo, digo de su condición chupa sangre… Y os voy a contar las cuatro cositas que me hubiera gustado saber antes de empezarlo, por si lo queréis tejer. Si pincháis en «leer más», os hacéis a la idea.
- Para empezar la Capa: Se hace con dos piezas iguales muy trabajadas y luego se cosen juntas. Lleva una negra y otra roja interior. Necesitas dos madejas de 100 grs. casi completas. Es decir, que pesa mucho una vez terminada. Yo lo tejí con ganchillo de 2’5 mm. Si como es bastante habitual usáis el de 3 mm. aún necesitaréis más lana u algodón. ¿Qué haría yo? si tengo que tejer otro la pieza exterior la pondré de terciopelo negro, o la interior de tela de forro rojo.
- Debido al peso de la Capa y de la cabeza, que en el modelo original es más grande que la de mi versión, creo que es necesario armar el amigurumi por dentro. Yo lo hice poniéndole un palo como columna vertebral, desde la cocorota al culo, y en el amarré los brazos en los que introduje unos limpiapipas doblados. ¿Se entiende?… mejor pongo una foto:
- Hay que tener en cuenta que la diseñadora original, solo introduce un alambre y deja un cuello de 6 pb para sostener unos 300 grs de material. Bueno, ella es genial pero a mí la gravedad no me respeta tanto.