Amigurumis por Encargo… y no sólo en Navidad.

Al llegar Diciembre solemos hacer balance del año y repasando fotografías me he dado cuenta de que 2019 ha sido un poco especial para Galamigurumis, porque os hemos compartido menos patrones de diseño propio de lo habitual y, en cambio, hemos  sido las amigurumistas del siglo, sin parar de trabajar. ¿Y eso cómo es? Porque hay una faceta de nuestro quehacer que no os comentamos:  ¡el ganchillo por encargo!

Os cuento. La mayoría de los encargos vienen acompañados de una fotografía. Es el caso de los Duendes Marrones con los que hoy os felicitamos la Navidad. Nos enviaron una foto sin firma, imposible de localizar el patrón (aunque luego supimos que probablemente es ruso) y tocaba sacar nuestra versión. Así quedaron, ¿a que son geniales? 

Posteriormente hemos encontrado un patrón gratuito que podéis adaptar, on dejo el link: DUENDES NAVIDEÑOS

¿Qué son distintos? Tengo que confesar mi gran defecto: ¡Nunca me sale un amigurumi igual! Lo más parecido de este año fue el Ratón de Venelopa Toys. Me pidieron un Ratoncito Pérez y como el Zoopeque mío era demasiado pequeño, tejimos el patrón de ella cambiándole el queso por su bolsita de los dientes.

Un encargo que adoré fue el de la prehistoria, cinco amigurumis distintos. Para ellos me basé en un libro de autores varios que ahora no sé dónde lo he metido. Saqué de ahí los Troglogumis y el T.Rex , luego hice el Dinocorn de Bubbles and Bongo y finalmente diseñé mi propio Triceratops, que de ese sí publiqué el patrón gratuito.

También me basé en un libro de Happy Coridon  llamado Insect Garden, para hacer una caja que recordara las colecciones de insectos aquellas, todos pinchaditos con sus alfileres… Bueno, algunos eran de cosecha propia, no siempre puedo reproducir sin ceder a la tentación de inventar. 

Otro cuadrito, este fue para Julieta

Más encargos: Una Lechuza que no recuerdo en cual fotografía me basé porque la cambié muchísimo. Un Unicornio recreado de la foto -también rusa- de un caballo, y las Bailarinas con Alas de Mariposa, que son la Muñeca Abril de la Crochetería. De esas me encargaron dos y no se parecían ni a la original ni entre sí. Y es que de pequeña no me gustaba tener la misma muñeca que otra niña. 

     

En medio de todos los encargos rejuvenecí varios años a nuestro Don Quijote. De él casi ni hablo porque los pedidos son constantes y sí, es diseño propio, pero os quería enseñar cómo había quedado. Voló a USA, para un profesor de español.

Y por último os voy a hablar de uno de los encargos más queridos de este año: Dragoberto. Es un peluche que en tiempos hacía Moulin Roty, pero ya no se encuentra y mira que lo he buscado por toda la red. Mi nieto tenía uno desde que nació y está ya muy ajadito de tanto trotar de ciudad en ciudad y hasta cambiar de continente. Tocó hacer un Dragoberto Amigurumi que pueda acompañarle por esos mundos el resto de su adolescencia y es que un amigurumi no es sólo para un niño, sino la expresión de muchas emociones que no tienen edad.

Hoy me han hecho un pedido nuevo: cambiar de tamaño un amigurumi y hacerlo supergrandote. Ya sabéis, cualquier locura que se os ocurra, estamos para complacer…. Con patrón nuestro o ajeno, basándonos en una fotografía o en un dibujo, siempre le damos nuestro toque personalizado sólo para ti.

Feliz Navidad.